
Si Shakespeare es uno de los constructores del alma humana moderna, como afirma Harold Bloom, en Los dos hidalgos de Verona empezará a desarrollar muchos de los elementos que van a definir esa concepción del ser humano.
Los dos hidalgos de Verona es una de las primeras comedias en las que afina las tensiones entre amistad y amor, tensiones que ocupaban un espacio no menor en la literatura de fines del Renacimiento. La amistad entendida como una forma de amor sin sexo estaba siendo tratada desde muchas perspectivas y enaltecida como una forma de alto compromiso sentimental opuesta a las relaciones amorosas. Escrita poco tiempo antes que Romeo y Julieta, comparte con ésta numerosos puntos de vista y de tensión dramática.